Programas Educativos
Ni los planes, ni los programas son malos... tan sólo ¿sabías que muchos países de América Latina quisieran adquirir los derechos de nuestros libros de texto gratuito?
El problema es mucho más complejo.
Me he dedicado de un tiempo a acá analizar diferentes problemas de nuestro sistema educativo y parece que las conclusiones apuntan hacia que son los maestros quienes emplean métodos ineficaces para llevarlos a cabo.
La razón puede originarse desde la formación docente, pues a pesar de que pudieran contar con excelentes maestros en las Normales, no advierten acerca de cuestiones prácticas: por ejemplo, los libros de texto están diseñados para llevar a cabo aprendizaje significativo, basado en el constructivismo, pero hay una constante que es que cuando los van resolviendo, lo hacen con métodos tradicionales, y no se propicia la verdadera reflexión de los alumnos; asimismo, a veces los experimentos o actividades que vienen en los libros no se llevan a cabo; otras, cuando los realizan, no se propicia la autoactividad de los alumnos, sino que el maestro sigue teniendo un papel de director que da las respuestas, que no propicia que los alumnos resuelvan problemáticas, que ofrezcan momentos de transferencia del conocimiento hacia situaciones cotidianas.
Otra de las problemáticas es que con el cambio de planes y programas desde 1993, se suprimieron las partes donde se propicia la construcción conceptual, sino que quienes lo diseñaron dejaron implícitos los conceptos en los ejercicios, y los maestros no se preocupan por hacer un análisis de contenido de lo que ahí se aprende para hacérselo evidente a los alumnos.
Por ejemplo: hacen una lectura de español (una lección) y a partir de ahí resuleven a diferentes cuestionamientos, sobre los cuales los maestros podrían elaborar cuadros-resumen, mapas conceptuales u otro apunte que reforzara la actividad de hacer explícitos los aprendizajes, lo cual no pasaba en generaciones anteriores, cuando se trabajaba con "unidades": soy formada en los 70's y aún recuerdo, por ejemplo, lo que eran lexema-gramema; los tiempos, modos, formas verbales; toooodas las partes de un enunciado; tengo experiencia en al análisis gramatical, significado de palabras; en la redacción con excelente ortografía y coherencia, etc. etc., que son conocimientos que nos fueron ordenados, sistematizados... aunque el inconveniente de la época era que debíamos memorizarlos (las muchas de las veces se sacrificaba a la comprensión y no se lograba al 100%)
Ahora lo que se pretende es que partan de experiencias y que ocurran en un todo (a través de lo que se llama globalización del conocimiento), de tal manera que en una sola actividad se pueden ver muchos temas, pero, te repito, la falta de pericia de los profesores es ahora no procurar el sintetizar y hacer explícito lo que se ha aprendido y ampliarlo con las explicaciones, así como reforzarlo con actividades extras.
Respecto a lo que planteas de la educación privada, efectivamente tienen la obligación de seguir planes y programas, así como los libros de texto de la SEP, puesto que está escrito en el artículo 3º constitucional y es una condicionante para poder tener su incorporación y validación de estudios.
Pero luego ocurre que los papás no quisieran pagar una colegiatura en una escuela donde sólo se llevarán los libros de texto gratuito, sino que esperan recibir otros servicios... por ello, aumenta la carga horaria para los niños de escuelas privadas con las "materias especiales", así como otros libros extra que agregan a sus actividades diarias.
Y dice el dicho "el que mucho abarca, poco aprieta", descuidando la calidad del aprendizaje.
También está la variable de los libros que se eligen como complemento, pues los hay los muy pobres en contenido y que sólo hacen algunas variantes de los libros de texto, en cuyo caso están mejor los que ofrece la SEP, o bien pueden tener excelentes libros de apoyo pero simplemente los profesores no saben cómo cerrar cada clase, ni planear sus actividades de reforzamiento, en cuyo caso parece que la constante es la falta de pericia de los profesores en su práctica educativa.
A veces es como una ruleta: la escuela puede ser muy buena y gozar de prestigio social (que no tenga nada que ver con aspectos de clase social, sino porque efectivamente sus egresados tienen excelente calidad), pero el profesor respecto de un grado al otro puede tener notables diferencias en sus logros docentes respecto al anterior.
Con esto te quiero decir que siempre es una cuestión de ética y compromiso por actualizarse, autoevaluarse, ser crítico respecto al logro académico de nuestros alumnos (sin autoengañarse), entre otros factores que dependen del alumno.
Personalmente conozco a muchos excelentes maestros de escuelas privadas y públicas, así como los muy malos o al menos un tanto "regulares" y entonces he podido constatar que no es el sistema educativo, sino la individualidad y el trabajo de los profesores quienes hacen la diferencia